¿Consume más el aire acondicionado o el ventilador?

Aire acondicionado vs. Ventilador

Como mencionamos, el aire acondicionado y el ventilador tienen funciones diferentes.

Con los sistemas de aire acondicionado se produce un cambio de temperatura en la estancia. El aparato tiene que enfriar el aire, además de distribuirlo, por ese motivo el consumo energético puede ser mayor. Visita nuestro artículo del blog y aprende a calcular consumo aire acondicionado

En el caso del ventilador, simplemente mueve el aire que hay en la estancia. Al ir “cambiando” el aire de un lugar a otro, se puede tener la sensación de que la temperatura baja (normalmente, dependiendo de las circunstancias, entre 3-5°C), pero realmente en la habitación sigue haciendo el mismo calor. Esta sensación de fresco puede cubrir nuestras necesidades, pero también ser insuficiente en determinadas situaciones.

Además, el efecto del ventilador está muy localizado. Si necesitamos refrescar espacios grandes o diferentes estancias, necesitaremos varios aparatos, lo cual aumentará el consumo eléctrico.

En cambio, los aires acondicionados están diseñados para refrigerar todo el espacio por igual. Si tenemos que climatizar distintos espacios, con el sistema Multi Split dispondremos de diversas unidades internas conectadas con una externa; cada una trabaja de forma independiente, pero, al formar parte del mismo sistema, el consumo es mucho menor que si tuviéramos aparatos individuales (Mono Split).

Otra cuestión que tener en cuenta a la hora de calcular el consumo del aire acondicionado y el ventilador es el tiempo de funcionamiento. El ventilador, además de necesitar menos potencia para funcionar, como tiene un efecto localizado, se utiliza solo en el momento, no se deja encendido. Sin embargo, con el aire sí se puede querer preparar una habitación o mantener determinada temperatura, por lo que tendrá que permanecer encendido durante más horas.

Ahora bien, aunque el aire acondicionado esté más horas, también tendremos más control sobre las mismas. Se puede programar el aparato o decidir utilizarlo en las horas en las que el precio de la luz esté más bajo. Si la estancia tiene un buen aislamiento térmico, se puede ajustar su climatización al horario más económico.

Junto con las necesidades que queramos cubrir y el tiempo de empleo de cada aparato, también se deben tener en cuenta las características del lugar donde vayamos a utilizarlos. El tamaño de la vivienda/espacio o el clima de la zona resultarán factores decisivos para medir el consumo.

Aire acondicionado o ventilador: consumo energético

Tanto con el aire acondicionado como con el ventilador, su consumo dependerá del tipo de aparato que tengamos.

Un ventilador básico consume poco más que una bombilla, pero también hay diferencias entre unos modelos y otros. Por ejemplo, según datos de e-ficiencia, un ventilador de pie gasta unos 90 vatios por hora; mientras que los de techo, como funcionan gracias a la inercia, tienen un consumo de unos 60 W/h.

En los sistemas de aire acondicionado, las diferencias son incluso mayores. En la actualidad, existen diversos modelos de aire acondicionado de alta eficiencia. Una cuestión clave es si el aparato cuenta con tecnología Inverter, que está diseñada específicamente para minimizar el consumo.

Esta tecnología permite que el aire acondicionado mantenga la estancia a una temperatura estable. Si es un aparato que depende de que se alcance o no lo que marque el termostato, el consumo será mayor, ya que se encenderá y apagará cuando deje de darse la temperatura indicada. A un aparato de aire acondicionado con tecnología Inverter estos cambios no le afectan.

Además, pese a que siempre relacionamos el aire acondicionado con la refrigeración para combatir las altas temperaturas del verano, hoy en día, gracias a los aparatos de aire acondicionado con bombas de calor, también podemos utilizarlos para calentar. Las bombas de calor obtienen energía gracias a la aerotermia (utilizan la fuerza del propio aire para generar energía), por lo que son más eficientes energéticamente y, en el caso de las bombas de calor reversibles, se pueden utilizar tanto para calentar como para refrescar el hogar.

En definitiva, si sólo atendemos al consumo energético del aire acondicionado y el ventilador, claramente es más alto para el primero. A la hora de elegir, habrá que tener en cuenta diversas cuestiones, empezando por nuestras necesidades. Te recomendamos que valores distintos puntos, como los diferentes aparatos que hay o las subvenciones disponibles. Antes de decidirte y, si tienes cualquier duda, ponte en contacto con nosotros y uno de nuestros expertos te asesorará personalizadamente.